Dijiste que ya tenía lo que vine a buscar y te susurré al oído: "A ti te tengo muy lejos, atrapada en la ventana..." Pero los ríos estaban revolviendo tu cabeza. Después del choque, vienen las olas y te dejan sin nada. Tienes que darme amor... Ahora los ecos son infinitos, cada vez que lo dices en voz alta. Y los susurros son pesados y poco a poco te derriban. Después del choque, vienen las olas y te dejan sin nada. Tienes que darme amor... Metiéndonos, lejos en otra noche.. Es un paisaje sin daño, cuando no se ve por encima de ella. Oh, no hay nada más que ahora. Hay que dejarlo de lado y olvidarlo, apenas vivo y olvidado.
Yo, tan lejos como para verte y tus ojos, tan lejos como para saberlo.
